Mejor coche, mejor segundo piloto y mejores cabezas pensantes dan mejor resultados. Uno solo mal se defiende.
Vettel, Webber, Horner y Newey vs, Alonso, Massa, Domenicali y Stella. La primera de cinco para los austriacos, y me temo que la segunda pinta tres cuartos de lo mismo.
No veo capaz de reaccionar al equipo de Maranello, sinceramente, creo que la “RedBullitis” que contrajeron hace dos años tras la famosa jugada de marras tapando a Vettel y sacrificando a Webber, no está curada ni mucho menos, cuanto me recuerda al Barça impotente ante el Madrid ( la famosa “madriditis”) y eso que mis colores futbolísticos distan mucho de ambos equipos, pero la impresión que tienen es de clara inferioridad contraída en tal fecha de la cual no se reponen pese a las vitaminas de Emilio Botín.
A la hora de calificar, los coches de Red Bull son imbatibles a día de hoy, lo de McLaren fue un breve espejismo y de poco vale tener un coche bueno en carrera ( que el Ferrari lo es, lo reconozco) cuando califica dos filas más atrás , dando lugar a lo sucedido en Japón o anteriormente en Spa.
Esas décimas que les separan suponen un muro de hormigon a derribar con un cortauñas, y si bien el talento de Alonso lo ha logrado en buena medida, ante los imponderables poco podemos hacer, salvo encomendarnos a La Madonna ( para los no versados, La Madonna es la Virgen en Italia, no la que canta) y esperar que estas cañas se tornen lanzas en pos del titulo.
Lo único que me anima a pensar, salvo el talento de nuestro Fernando Alonso, es la fiabilidad de los motores Renault , pues han sido responsables sin ir mas lejos del último cero de Vettel frente a los motores de Ferrari ( aunque baste mencionarlo para que se rompan) y ese par de motores que apenas han recorrido las clasificaciones con poco desgaste frente a los ya más agotados de Renault, pero eso es parecido a esperar que Falcao o Adrián no jueguen frente a sus rivales por exceso de partidos , no se , no me convence , pero eso es lo único que me consuela.
Si observamos con un poco de detalle los GP restantes y sus circuitos, India, Abu Dhabi, USA y Brasil ,la balanza se inclina a favor de los coches con alas frente los del cavallino, pues en India Vettel quedó por delante en 2011, Abu Dhabi es el circuito de la “redbullitis” USA es una incógnita al debutar este año y en Brasil lo único que me ofrece garantía es la consecución de los dos anteriores campeonatos de Fernando, insisto, poca chance bajo mi punto de vista, y ojalá me equivoque.
Técnicamente en este GP RBR y su doble DRS deja bien claro quien lleva la delantera en el tema, y Williams con su nuevo morro son los que parecen relamente avanzar los coches de esta temporada.
Mencionar a Monisha Kaltenborn como la futura patrona de Sauber , ya que Peter Sauber que se retira y a Maria de Villota.
Maria ha vuelto con más ganas que nunca, bella y valiente como la Princesa de Éboli, y capaz de sorprender al más versado, lo cual espero, y creo posible, pues he comprobado personalmente como en ese tipo de lesiones se sale y se vuelve, especialmente en el mundo taurino, y no me refiero a Juan José Padilla, del cual no tengo suerte de conocerle, pero si me precio de ser amigo de Lucio Sandín ( un abrazo, Lucio), lector de este blog, el cual sufrió un accidente similar y con tesón volvió, toreó, disfrutó y triunfó, por lo que María, estoy muy seguro, volverá a darnos satisfacciones muy pronto.
El pasado mes de febrero, me reunía con Emilio de Villota con el fin de poder contrastar informaciones y actuaciones ocurridas en 1.980 y 1.981 durante el GP de España y protagonizadas por él, pues estoy cerrando las correciones de mi libro sobre los GP de España, motivo de mi visita.
Emilio, aún convaleciente de un catarro y con la voz un poco tomada me contó lo sucedido y protagonizado, disfruté con su relato y visita a las instalaciones del equipo.
Ya con la conversación finalizada mientras me firmaba un poster de la época ( uno de mis tesoros) sono su móvil y al otro lado llamaba María desde Londres, pues estaba aún negociando con Lotus antes de acabar en Marussia, y si vi algo es la cara de Emilio brillar con orgullo de su hija.
Pues ahora brilla también la mía, y seguro que brillará más aún cuando María nos sorprenda de nuevo, que lo hará.
Nos vemos en India, y un abrazo para la Familia Villota.
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